El 29 de diciembre de 1922 se crea la URSS – Union de Republicas Socialistas Sovieticas
Los planes quinquenales para la economía nacional de la URSS, fueron una serie de proyectos internacionales centralizados en el eficiente desarrollo económico de la creciente Unión Soviética. Estos proyectos fueron desarrollados por el Gosplán basándose en la “Teoría de las fuerzas productivas”, que era parte de las directrices generales del Partido Comunista para el desarrollo económico. La realización del plan llegó a ser la insignia. Estos planes consistían en la planificación de la economía cada cinco años.
Los planes quinquenales iniciales fueron creados para ayudar en la rápida industrialización de la Unión Soviética,3 por tanto se concentraron los esfuerzos en la industria pesada. El primero fue aceptado en 1928 para el quinquenio de 1929 a 1933, y completado un año antes de lo previsto. De 1928 a 1945 se decretaron tres planes: 1928-1932, 1933-1937 y 1938-1941. Este último se vio interrumpido por la invasión alemana. (Wikipedia)
El primer plan quinquenal (Wikipedia)
El objetivo del primer plan quinquenal (1928-1932) era levantar la industria pesada de la URSS sin recurrir a la ayuda de los países extranjeros, contribuyendo a hacer a ese país autosuficiente desde el punto de vista industrial y militar. Pero la URSS continuaba siendo un país agrario, por lo que se debía de realizar antes una importante reforma agraria.
La colectivización de la tierra, preveía la formación de granjas colectivas que se considerarían propiedad de los campesinos. Esta colectivización provocó conflictos entre el estado y los campesinos propietarios especialmente, propietarios medios (kuláks), pero al final el estado se impuso mediante la violencia. Miles de kuláks fueron deportados a campos de trabajo, con penas de hasta 10 años, debido a los crímenes cometidos contra los campesinos (asesinaron a muchos durante los conflictos, sacrificaron los animales que ayudaban a trabajar la tierra, e incendiaron las cosechas, creando profundas hambrunas y epidemias)
La agricultura fue durante mucho tiempo el sector más débil de la economía soviética.
El plan administrado por el entonces nuevo ente u organismo estatal denominado Gosplan, el Primer Plan Quinquenal empleó tácticas tales como el mantenimiento de registros detallados de cada bien o ítem fabricado en la Unión Soviética para tratar de enviarlo hacia dónde se lo necesitaba en un determinado momento (idea por lo menos conceptualmente similar al moderno método corporativo justo a tiempo o, en inglés, Just in time).
La creación de granjas Colectivas (Koljoses) mediante la colectivización forzada, esencialmente destruyó a los kuláks (campesinos relativamente ricos) como clase social y también llevó al sacrificio de millones de animales de granja que los campesinos preferían matar en lugar de entregarlas..
La introducción de la colectivización potenció la industrialización del país, a medida que varios millones de agricultores o habitantes rurales -que habían llegado a históricamente representar nada menos que un 80% de la población total del país- se mudaron del campo a la ciudad, dando comienzo al fenómeno de urbanización soviética que caracterizaría al país durante las décadas venideras.
El segundo plan quinquenal
El segundo plan (1933-1938) se centró en mejorar las condiciones de vida de la población e hizo hincapié en la autosuficiencia, sobre todo de la industria pesada, fundamental para la producción bélica. El crecimiento industrial durante los primeros diez años de la planificación fue espectacular: la producción de hierro y acero se multiplicó por cuatro y la del carbón por tres y medio.
El desarrollo en la industria base, permitió la conversión de la URSS en una potencia militar.
Mientras que el primer plan lo «sacrificó todo» a los elementos más imprescindibles como la industria pesada, en este segundo plan, realizado entre 1933 y 1937, se prestó especial atención a otros elementos, se caracterizó por ser más equitativo con todos los sectores económicos. Este plan fue mucho más sencillo de realizar por las altas y mayores inversiones. Se tendió a desarrollar sobre todo industrias productoras de bienes de consumo, transportes, etc.
Al terminar en 1937 el segundo plan quinquenal y después de 10 años de planificación, la economía había tenido un gran crecimiento: desde 1928, la industria ligera cuadruplicó su valor y la metalurgia y la siderurgia crecieron un 690%. Este último plan sobrepasó todas las previsiones, realizándose en un 102%, pero con un reparto desigual: 104% en el azúcar y el acero, un 107% en el calzado, un 100% en el laminado, un 96% en la electrificación, un 90% tanto en la fundición como en la extracción de carbón, pero solo un 64 y un 46% respectivamente en el algodón y la lana.
Esta segunda etapa de economía planificada vio el auge del movimiento estajanovista, que propugnaba el aumento de la productividad laboral por iniciativa propia de los trabajadores. El movimiento comenzó de la mano del minero Alekséi Stajánov cuando el 31 de agosto de 1935 extrajo de su pozo de carbón en el Donetsk 102 toneladas de carbón en un turno, cuando lo normal eran 8. Pronto su acción fue emulada, dándose casos como las 607 toneladas extraídas por el también minero Nikita Izotov. La influencia de este movimiento hizo que la productividad durante el segundo plan quinquenal creciera un 82%.
El tercer plan quinquenal
El tercer plan quinquenal sólo duró 3 años, hasta 1941, cuando la Alemania nazi invadió Rusia y esta entró en la Segunda Guerra Mundial. Como la guerra se acercaba, más recursos se pusieron en el desarrollo de armamentos, tanques y armas.
Durante la década de 1930, la Unión Soviética alcanzó una tasa anual de crecimiento industrial del 12% al 13%, tiene pocos paralelos en la historia económica de otros países.
Dado que la economía de Rusia siempre fue a la zaga del resto de Europa, estos aumentos parecen aún más drásticos. Además, esta alta tasa de crecimiento fue seguida después de la Segunda Guerra Mundial, tras la devastación que tenía que ser reparada, y continuó en los primeros años cincuenta, después disminuyó gradualmente.9
Este plan tenía por meta el desarrollo de las industrias especializadas, especialmente la industria química. Se había proyectado un crecimiento mucho más rápido que sus precedentes. Las directrices contemplaban un cambio de modelo: el gigantismo industrial, centrado en lugares muy concretos de la geografía, ya no se antojaba el mejor modelo de crecimiento a largo plazo, sino que se optaría por una descentralización industrial y una mayor equidad en su reparto que daría lugar a enormes tasas de crecimiento demográfico e industrial en el Asia soviética y las zonas siberianas. Estas nuevas políticas verían la luz a todos los efectos a partir de la década de 1950. La Segunda Guerra Mundial interrumpió la ejecución del plan que había conseguido alcanzar el 70% de las previsiones en 1941
Un crecimiento espectacular
En el Primer Plan Quinquenal, a pesar de que algunas de las metas eran increíblemente altas (tales como un 250% de incremento estipulado para la producción industrial total y hasta un 330% de expansión en la industria pesada en particular), se lograron resultados destacables.
En el momento en el que el ataque de la Alemania nazi arrastra a la Unión Soviética a la Segunda Guerra Mundial, la industrialización es un hecho consumado y la colectivización agraria está prácticamente finalizada.
Las industrias y el comercio privado han sido eliminados y la Unión Soviética se ha convertido en una potencia económica.
Durante la segunda mitad de la década de 1930 ya se disputa la posición de segunda potencia económica con Alemania, aún a gran distancia del liderazgo estadounidense, pero dejando muy atrás a Francia y Gran Bretaña. En 1940 la producción industrial soviética se estima en un 85% del total de una Alemania ya en guerra.
La producción agrícola, constantemente lastrada, consigue despegar y su volumen de producción supera en un 57% a la cosecha de 1913. La producción entre 1913 y 1940 de cereales se ve incrementada un 32%, la de remolacha un 98%, pero el aumento más espectacular se produce en el algodón, cuya producción se triplica. Aun así el sector primario tiende a reducirse en favor del sector industrial, cuyo desarrollo no deja de asombrar. Hasta entonces, todos los países que habían pasado de una economía arcaica a una desarrollada se habían industrializado muy lentamente y siempre dependiendo del capital y las políticas de países capitalistas avanzados. Pero la Unión Soviética, en apenas una década y sin haber comprometido su independencia, logra convertirse en tercera potencia mundial en 1940 tras apenas una década de industrialización, quemando las etapas de cualquier precedente de revolución industrial.
En 1941 la Unión ocupa el segundo lugar a nivel mundial en la producción de hierro, petróleo y oro. Es el tercero en producción eléctrica, fundición, acero y algodón. Y el cuarto en la producción de carbón y motores de automóvil. El ejemplo más espectacular de esta transformación puede encontrarse en la electrificación, que pasa de una producción de 2500 millones de kWh en 1928 a 40 000 millones en 1938, un aumento del 1600% en una década. Esta energía es suministrada por potentes centrales térmicas, pero también por grandes centrales hidroeléctricas. Lo mismo ocurre en otras industrias como el caucho (antes inexistente) que cubre la mitad de las necesidades utilizando plantas de látex aclimatadas, con lo que se fabrica caucho sintético. Este progreso no hubiera sido posible sin los más de 20 000 técnicos y especialistas extranjeros que llegaron a la Unión Soviética para supervisar o diseñar las grandes obras de ingeniería y la gran industria.
Producción en millones de toneladas y kWh
Año |
Fundición |
Acero |
Electricidad |
1913 | 4,6 | 4,9 | 2,04 |
1928 | 3,3 | 4,8 | 8,4 |
1940 | 14,9 | 18,3 | 48,31 |
Evolución del PNB de la URSS en comparación con las potencias europeas (en millones de dólares de 1960)
País | 1890 | 1900 | 1913 | 1925 | 1938 |
URSS | 21 180 | 32 000 | 52 420 | 32 600 | 75 964 |
Alemania | 26 454 | 35 800 | 49 760 | 45 002 | 77 178 |
Gran Bretaña | 29 441 | 36 273 | 44 074 | 43 700 | 56 103 |
Francia | 19 758 | 23 500 | 27 401 | 36 262 | 39 284 |
Los transportes fueron también muy mejorados. Durante la década de 1930 se construyó una completa red de canales, como el canal Báltico-Mar Blanco, abierto en 1933, y el canal Moscú-Volga que se terminó en 1937; estos canales convirtieron a Moscú en un importante puerto fluvial. Los ferrocarriles se convirtieron en el principal medio de transporte y sus líneas fueron ampliadas y modernizadas. El transiberiano triplicó sus líneas, el enlace Moscú-Leningrado dobló su capacidad y una infinidad de nuevas líneas fueron construidas, las cuales conducían a nuevos centros industriales y a los más recónditos territorios de la Unión Soviética —Urales-Kuznets, Moscú-Jarkov o Karaganda-Balkach.
Industrias muy atrasadas tuvieron una impresionante expansión: la producción de remolacha se dobló con respecto a 1913, la del algodón se triplicó. La Unión volvió a tener un hueco en el comercio mundial y el 68% de sus exportaciones ya eran productos manufacturados en 1941. La producción de la Unión Soviética significaba el 12% de la producción mundial en 1941 —el peso de EE.UU era del 34,4%, y el de Alemania el 13,3%, sus principales competidores-.
Indice produccion 1913 -1940
https://victoriaoprimidos.wordpress.com/2014/04/17/crecimiento-economico-en-la-urss/